Chemex: el método de filtrado que todo amante del café debe probar

Entre tantos métodos para preparar café, la cafetera Chemex se ha convertido en un ícono. No solo por su forma elegante y minimalista, sino porque representa una verdadera experiencia sensorial. Este método manual transforma la rutina de preparar café en un ritual que combina ciencia, diseño y pasión por el buen sabor.

Si te preguntas cómo hacer café y que este realmente sorprenda, el método que te mostramos a continuación es un excelente punto de partida.

 

Chemex: un diseño que enamora desde 1941

Esta cafetera fue creada por el químico Peter Schlumbohm en 1941, en Alemania. Su estética única —de vidrio borosilicato en forma de reloj de arena, con cuello estrecho y un característico collar de madera— le ha valido reconocimientos internacionales.

Cada elemento de su diseño tiene un propósito: mantener la temperatura, regular el flujo del agua y aislar el calor para un mejor agarre. Un dato curioso: la cafetera es parte de la colección permanente del MoMA desde 1943 (Flavors, 2019).

 

Ingeniería que realza el café

Lo que diferencia a esta cafetera de otros métodos no es solo su apariencia. Es, también, su precisión técnica.

  • El ángulo de 60° en su filtro permite un contacto óptimo entre el agua y el café.

  • Los filtros de papel son un 20-30% más pesados que los comunes.

  • Su cuello estrecho y el espesor del vidrio mantienen estable la temperatura.

Este diseño permite una extracción lenta y uniforme. Es ideal para revelar matices sutiles, florales o frutales.

 

¿Por qué elegir la Chemex frente a otros métodos?

Cada cafetera tiene su encanto, pero si buscas la mejor combinación entre diseño, sabor y experiencia, vale la pena ver cómo se mide esta frente a otras opciones clásicas.

Prensa francesa

La cafetera creada por Schlumbohm ofrece una taza más limpia gracias a su filtración más fina. Esto elimina sedimentos y aceites amargos. La prensa francesa, en cambio, produce una bebida más intensa y con cuerpo, pero menos definida.

V60

El V60 es un método muy popular entre los amantes del café de especialidad por su rapidez y capacidad para acentuar la acidez natural de ciertos granos. Es ideal para quienes buscan preparar su café en solo 2 o 3 minutos.

Sin embargo, la Chemex se destaca por ofrecer mayor estabilidad térmica y una extracción más lenta y controlada. Esto se traduce en una bebida más balanceada, con sabores bien integrados y una consistencia que se mantiene taza tras taza.

Aeropress

El Aeropress es ideal para cafés fuertes, portátiles y rápidos. Pero si buscas claridad, volumen y elegancia, la Chemex es la elección perfecta.

 

Qué necesitas para preparar café en la Chemex

Dominar este método es fácil, especialmente si cuentas con las herramientas adecuadas. Si no tienes exactamente algunos de los siguientes elementos, puedes reemplazarlos con los más parecidos que encuentres:

  • Cafetera Chemex (preferiblemente de 6 tazas)

  • Filtros originales

  • Café recién molido tipo arena gruesa (55-60 g por litro)

  • Agua filtrada o mineral, a 93-96 °C

  • Tetera de cuello fino, báscula y cronómetro

Tip de un experto: asegúrate de que el lado más grueso del filtro (el pliegue triple) esté orientado hacia el pico. Esto evita obstrucciones y mejora la extracción.

  1. Enjuaga el filtro con agua caliente.

  2. Agrega 30 g de café para 500 ml de agua.

  3. Realiza el bloom: vierte 60 ml de agua y espera 30 segundos.

  4. Vierte el resto en espirales en 3:30-4:00 minutos.

¿Tu café quedó amargo? Prueba moler más grueso. ¿Muy débil? Ajusta el molido más fino.

Aunque este método es ideal para cafés sin leche, también puedes usarla como base para bebidas especiales. Su perfil limpio es perfecto para quienes buscan versiones más elegantes. Por ejemplo, clásicos como un Caramel macchiato o un Pumpkin latte.


Si estás buscando mejorar tu ritual diario para tomar café o experimentar con productos artesanales, esta cafetera merece un lugar en tu cocina.